El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió castigo para los candidatos que entreguen despensas o tarjetas a cambio del voto, sin importar del partido que sean.

El voto  no es una mercancía y no debe haber nada a cambio, dijo.

“Qué bien que tuvo efecto nuestra denuncia porque es un mal que se entreguen tarjetas o despensas o se compren votos en las elecciones. Está muy mal eso, eso es antidemocrático. El voto tiene que ser libre, secreto, no debe haber nada a cambio, no es una mercancía”.

Luego de la denuncia que hizo del candidato del PRI al gobierno de Nuevo León por la entrega de tarjetas, el mandatario reconoció el trabajo de la Fiscalía por la investigación al respecto y pidió que se aplique parejo.

Al ser notificado que candidatos de Morena, partido que lo llevó a la presidencia, también incurren en la entrega de despensas y tarjetas, conminó a la Fiscalía a investigar y castigar a todos.

“Si hicimos una denuncia y salen otros casos, qué bueno, y hay que denunciar todos los casos, sean del partido que sean, porque es ilegal la compra del voto de manera directa o simulada”, declaró.

Deber democrático

El primer mandatario enfatizó que es un deber democrático denunciar la compra de votos y cualquier acto que impida las elecciones libres. 

“Un demócrata no puede permitir que se compren los votos, no se puede hacer de la vista gorda ante un fraude. Un demócrata tiene que denunciar cualquier acto que impida la libre manifestación, el ejercicio del derecho a votar, que es sagrado”.

De ahí que defendió su denuncia ante lo que ayer calificó como una compra descarada de votos, de parte del candidato priísta Adrián de la Garza.

Situación que el Instituto Nacional Electoral acreditó como intromisión del presidente de México en el proceso electoral.

Pero el mandatario señaló la ceguera de la autoridad electoral ante el flagrante delito electoral.

“Si no le gusta al director el INE, es su problema, porque él no es demócrata, ya lo ha demostrado lo suficiente”, declaró el primer mandatario.

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M21