El presidente Andrés Manuel López Obrador aceptó que el mayor desafío de su gobierno es resolver el problema de la inseguridad y la violencia, de lo contrario “no seremos recordados como buenos gobernantes”.

Durante la inauguración de las instalaciones de la Guardia Nacional en Villa Ahumada, Chihuahua, el primer mandatario destacó que es posible avanzar hacia un estado de bienestar, pero hay pendientes.

“Estoy consciente que podemos avanzar mucho en el terreno económico, en lo político en el que cada vez haya más democracia en el terreno social, que haya un estado de bienestar, que el mexicano tenga seguridad, protección desde que nace hasta que muere, desde la cuna hasta la tumba, y vamos hacia allá”.

“Pero si no resolvemos el problema de la inseguridad y de la violencia no vamos a ser reconocidos, recordados como buenos gobernantes”.

El mandatario nacional reiteró que su política de seguridad tiene su base en la atención de las causas de la violencia y la inseguridad, así como el combate a la impunidad, son acciones fundamentales para pacificar al país.

Corrupción heredada

“La corrupción es la causa principal de la desigualdad económica y social de nuestro país y la corrupción y la desigualdad nos han llevado a la violencia”.

Por ello, es necesario “cambiar esta situación de injusticias. El mexicano tiene que tener oportunidades de progreso y por eso es esta transformación”, dijo.

De ahí que reiteró que aumentará en 50 mil millones de pesos el presupuesto de la Guardia Nacional para que, al terminar el sexenio, la institución quede consolidada.

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M21